Declaración de Fe

1. Las Sagradas Escrituras

Creemos que la Santa Biblia fue inspirada verbal y plenariamente por Dios y escrita por hombres controlados por el Espíritu Santo; por tanto, es enteramente inerrante en su forma original y es preservada por Dios en todas las generaciones. Creemos que la Biblia es la suprema revelación de la voluntad de Dios para el hombre, y que es nuestra única regla de fe y práctica. Creemos que la Palabra de Dios está preservada a través de la línea de textos hebreos conocidos como el texto masorético y en el griego conocido como el texto recibido y no el texto crítico. (2 Timoteo 3:16-17; 2 Pedro 1:19-21)

2. La Persona de Dios

Creemos en un solo Dios, que se manifiesta en tres personas eternas: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo (la Trinidad), iguales en toda perfección, uno en su ser y esencia pero desempeñando oficios distintos y armoniosos en la obra de la redención. Él es el Creador de todas las cosas visibles e invisibles. Él es digno de toda gloria, honra y alabanza. Él es el único y supremo Dios y junto con Él, no hay otro. Él es omnipotente, omnisciente, y omnipresente. (Génesis 1:1; Éxodo 20:2-3; Deuteronomio 4:35; 1 Juan 5:7, Deuteronomio 6:4, Juan 4:24, Romanos 8:14-15)

3. La Persona de Jesucristo

Creemos en la deidad absoluta del Hijo, el Señor Jesucristo; quien es eterno y co-igual con el Padre y el Espíritu Santo; que nunca dejó de ser Dios ni un solo momento; que es el único mediador entre Dios y los hombres; que como hombre nació de la virgen María, siendo engendrado por obra del Espíritu Santo en una manera milagrosa en cumplimiento de la promesa y las profecías del advenimiento de un Salvador quien es el Mesías o Cristo; que vivió una vida absolutamente sin pecado; que su muerte hizo completa y vicaria propiciación por nuestros pecados; que murió como sustituto voluntario por el pecador; que resucitó al tercer día y ascendió corporalmente al cielo; que volverá otra vez a este mundo para establecer su reino y para sentarse sobre el trono de David; que su venida es personal y premilenial. (Isaías 7:14; Juan 1:1-2; 1 Juan 5:20; 1 Pedro 3:18; Mateo 28:6; Hechos 15:16; Mateo 1:16-25; 1 Pedro 2:22; Juan 14:3)

4. La Persona del Espíritu Santo

Creemos que el Espíritu Santo es Dios, poseedor de todos los atributos de personalidad y deidad, que es co-igual con el Padre y el Hijo y es de la misma naturaleza; que en cuanto a su relación al mundo incrédulo, convence de pecado, justicia y juicio; que es el agente de la regeneración; que sella, dota, guía, enseña, testifica y ayuda al creyente. (Juan 14:16-17; Romanos 8:1-27; 2 Corintios 13:14; Efesios 1:13-14)

Creemos que todo creyente verdadero es bautizado por el Espíritu Santo en el cuerpo de Cristo en el momento en que confía en Cristo como su Salvador y que esto no es una experiencia posterior a la salvación; que el Espíritu Santo reparte dones espirituales a los creyentes para servir al Señor y ministrar a la iglesia. Creemos que la “plenitud del Espíritu Santo” es manifestada por el fruto del Espíritu (Gálatas 5:22-23) y en el poder de testificar. No estamos de acuerdo con el movimiento moderno carismático. No permitimos ninguna promoción del movimiento moderno de lenguas. (Isaías 61:1-3, Juan 16:7-15)

5. El Hombre

Creemos que el hombre fue creado por Dios en inocencia, más por transgresión voluntaria cayo de tal estado, en consecuencia, todo hombre nace pecador; por instinto y voluntad propia sigue el pecado; por lo tanto, está bajo condenación y justa perdición eterna sin defensa ni excusa (Génesis 1:27; Isaías 53:6; Romanos 5:12-19; Romanos 3:23; Efesios 2:1)

6. La Salvación

Creemos que la salvación es totalmente por gracia (favor inmerecido) mediante la obra completa de Cristo; que para ser salvo es preciso nacer de nuevo y recibir una nueva naturaleza; que todo pecador que confía en Cristo como su único hijo y suficiente Salvador, es nacido de nuevo, es completamente justificado y posee una salvación que es eternamente segura; que la salvación no tiene nada que ver con nuestras obras, las cuales por más buenas que sean no nos ayudan a alcanzar la salvación, ni la hacen más segura. (Efesios 2:8-9; Juan 10:27; Romanos 3:28: Hechos 16:30-31; Juan 3:16-18; 1 Pedro 1:5)

7. La Seguridad del Creyente

Creemos que todo aquel que cree en el Señor Jesucristo como su Salvador personal es salvo (tiene todos sus pecados pasados, presentes y futuros completamente perdonados por Dios) y nunca perderá esta salvación (vida eterna para siempre con Dios). (Efesios 2:8-9, Juan 10:28-30, Tito 3:5)

8. La Iglesia

Creemos que la iglesia invisible y universal se compone de todos los salvos hasta el rapto, y que esta iglesia invisible se manifiesta en iglesias locales que son asambleas de creyentes bautizados por inmersión después de dar confesión de su fe en Jesucristo, unidos por un pacto de fe y comunión del evangelio; que tiene dos oficiales: pastores (también llamados obispos o ancianos) y diáconos cuyos requisitos se encuentran en las epístolas de Tito y Timoteo; que cada iglesia local es soberana en su gobierno interno, siendo autónoma, democrática e independiente; que existe con el fin de adorar a Dios y buscar a más personas para adorarlo, proclamando el evangelio en todo el mundo; que hace la obra del Señor siendo su cuerpo visible en el mundo y observa sus ordenanzas. (1 Corintios 1:26; 1 Timoteo 3:1-15; Tito 1:5-9)

9. El Infierno

Creemos en un infierno literal, que es el lugar de tormento para aquellos que no han creído en el derramamiento de la sangre de Jesucristo.  Luego los que están en el infierno van a ser juzgados en el gran trono blanco y después lanzados en el lago de fuego eternal. (Lucas 16:19-31, Mateo 25:46, 2 Tesalonicenses 1:9, Apocalipsis 20:14-15)

10. La Creación

Creemos que Dios creó el universo físico, la multitud de los cielos, y el hombre en un acto creativo directo e inmediato que ocurrió en seis días literales (24 horas) como la Biblia anota. Rechazamos todas las teorías que intentan reconciliar la creación según la Biblia con cualquier teoría o proceso relacionado a la evolución o pseudo-ciencia. Esto incluye las teorías tales como la teoría del intervalo, o del día-era, etc. (Génesis 1:1, Éxodo 20:11)

11. El Bautismo y la Cena del Señor

Creemos que el bautismo es la inmersión del creyente en agua para testificar en una manera simbólica que ha puesto su fe en el Salvador crucificado, sepultado y resucitado y que esta fe resulta en la muerte al pecado y la resurrección a una nueva vida.

Creemos que la cena del Señor es la conmemoración de la muerte de Cristo por nosotros; que debemos seguir observándola hasta que el venga; que debe ser precedida por una solemne examinación propia del creyente. (1 Corintios 11:22-28)

12. El Estado Eterno

Creemos que los que por medio de la fe en Jesucristo han sido justificados pasarán la eternidad en pleno gozo en la presencia de Dios. Mientras todos los que siguen en su incredulidad e impenitencia pasarán la eternidad en sufrimiento consciente y eterno. (Juan 8:21; Juan 14:2; Mateo 25:46)

13. Satanás

Creemos en la persona de Satanás; que fue creado por Dios, como un ángel de luz, más se rebeló al Señor y está bajo condenación; que es el dios de este siglo, príncipe de la potestad del aire, que está lleno de engaño y es el padre de mentira; que busca continuamente frustrar los propósitos divinos y engañar a los hijos de los hombres.  (Efesios 2:2; Isaías 14:12-17; 2 Corintios 4:4, 11, 13-15; Apocalipsis 12:9)

14. El Mundo

Creemos que el mundo está bajo el dominio de Satanás; que la amistad con el mundo es enemistad con Dios; que el creyente es llamado a separarse del mundo a una vida de santidad.  (Santiago 4:4; 2 Corintios 6:12-18; 1 Juan 2:15-17; Romanos 12:1-2; 1 Pedro 1:16)

15. El Gobierno Civil

Creemos que el gobierno civil está puesto por Dios para el bienestar y el orden de la sociedad humana; que debemos orar por los magistrados, honrarles en conciencia y obedecerles, salvo en aquellas cosas que sean opuestas a la voluntad del Señor; que debe haber una separación completa entre el estado y la iglesia.  (Romanos 13:1-7; 1 Timoteo 2:1-2; Tito 3:1; 1 Pedro 13:17)

16. El Matrimonio

Creemos que el matrimonio fue establecido por Dios en el huerto de Edén cuando Dios creó a Adán y trajo a él su esposa Eva y los bendijo. Creemos que el matrimonio debe ser solamente y exclusivamente entre un hombre y una mujer (humanos) como pareja. Creemos que la homosexualidad y el lesbianismo son contra el bienestar de la sociedad y familia y es prohibido por Dios en su palabra.  Creemos que el matrimonio es para toda la vida y que solo la muerte los separará. (Por esta razón los oficiales de la Iglesia Bautista Efata están prohibidos de celebrar un matrimonio entre divorciados, homosexuales o cualquier otro tipo de celebración matrimonial que no concuerde con las Sagradas Escrituras). (Génesis 2:18-24; Levítico 18:22-24; 20:13; Mateo 5:32; 19:8-9; Romanos 1:26-28; 1 Corintios 6:9-15)